
La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, afirmó que cancelar la deuda del Fondo Bancario de Protección al Ahorro (Fobaproa) no es un proceso que pueda realizarse de manera inmediata, y que los ciudadanos mexicanos continuarán pagando este compromiso financiero hasta el año 2050.
“Los bonos del IPAB que actualmente pueden adquirirse en el mercado no pueden dejarse de pagar de un día para otro. Cualquier decisión en ese sentido tendría consecuencias significativas para el país”, advirtió la mandataria.
Durante su conferencia matutina, Sheinbaum presentó un informe de la Auditoría Superior de la Federación en el que se señala que el Fobaproa operó sin lineamientos claros ni políticas generales que garantizaran transparencia o justificaran su aplicación.
La presidenta puntualizó que el verdadero problema del Fobaproa no fue el rescate bancario en sí, sino el hecho de que una deuda privada se convirtiera en una carga pública para toda la población, en un contexto de reglas operativas discrecionales.
“El comité técnico del Fobaproa tomó decisiones sin contar con normas ni políticas que aseguraran transparencia o una adecuada justificación económica de los apoyos otorgados por el Gobierno federal”, explicó.
Finalmente, Sheinbaum anunció que invitará al secretario de Hacienda, Édgar Abraham Amador Zamora, para que informe públicamente cuánto se ha pagado hasta ahora y cuánto resta por cubrir de la deuda relacionada con el rescate bancario.