
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, lanzó un enérgico llamado a Israel para que ponga fin a la crisis humanitaria que se vive en Gaza, donde cientos de civiles han perdido la vida debido a la falta de alimentos.
De acuerdo con el organismo internacional, desde el inicio del conflicto armado al menos 370 palestinos han fallecido a consecuencia de la desnutrición y del hambre extrema, una situación que calificó como una tragedia completamente evitable.
“Nos enfrentamos a una catástrofe de proporciones devastadoras, que Israel pudo haber prevenido y que, si lo decide, puede detener de inmediato”, declaró Ghebreyesus ante medios de comunicación en la sede de la OMS en Ginebra.
El funcionario subrayó que usar el hambre de la población civil como estrategia bélica constituye un crimen de guerra, una práctica prohibida por el derecho internacional humanitario. Añadió que la comunidad internacional no debe permanecer indiferente y que es urgente permitir el ingreso de ayuda humanitaria sin restricciones para salvar vidas.
La declaración se suma a los reiterados llamados de organizaciones humanitarias y de derechos humanos que han denunciado el bloqueo de alimentos y medicinas en la franja, lo que agrava la vulnerabilidad de la población palestina, en especial de los niños y las mujeres embarazadas.