
El cielo se vistió de gala con la súper luna azul, un fenómeno que, según los registros astronómicos, no volveremos a presenciar hasta el año 2037.
Las superlunas, como su nombre indica, se refieren a cuando nuestro satélite natural, la Luna, pasa por su perigeo, es decir, el punto de su órbita elíptica más cercano a la Tierra. Esta proximidad hace que la Luna se vea aproximadamente un 14 por ciento más grande y un poco más brillante en comparación a cuando está en su punto más lejano, el apogeo.
El término «Luna Azul» no tiene relación con el color del satélite, sino que hace referencia a la ocasión, bastante inusual, en que dos lunas llenas ocurren en un mismo mes.
Este fenómeno solo sucede cada dos o tres años, por lo que ha dado origen al término «una vez en una luna azul» para describir algo raro o especial.
Para los madrugadores, el 31 de agosto de 2023, a las 3:35 de la madrugada, fue el momento perfecto para disfrutar de este espectáculo del universo. Además, el fenómeno fue aún más especial ya que la Luna estuvo un siete por coento más cerca de la Tierra que el resto del año y fue principalmente visible desde el hemisferio norte.