Al menos nueve personas perdieron la vida y dos mil 800 resultaron heridas este martes en Líbano debido a la explosión de dispositivos inalámbricos de comunicación, conocidos como beepers, que supuestamente eran utilizados por miembros de la milicia chiita Hezbollah.
El grupo confirmó la muerte de dos de sus combatientes y de una niña, además de responsabilizar a Israel por lo que llamaron «agresión criminal» en un comunicado.
Ante la emergencia, el ministerio pidió a los hospitales aumentar su nivel de alerta para poder atender a la gran cantidad de heridos por las explosiones que ocurrieron en diferentes zonas del país.
Asimismo, advirtieron a los ciudadanos que se mantuvieran alejados de los dispositivos de comunicación inalámbrica hasta que se esclarezca lo sucedido.
La agencia Mehr informó que «Mojtaba Amani, embajador de Irán en Líbano, resultó herido por la explosión de un mensáfono», quien fue atendido en un hospital.
Irán es un aliado clave de Hezbolá, apoyando al grupo desde los años 80 con financiamiento y armamento. Además, Teherán lidera el llamado ‘Eje de la resistencia’, una coalición antiisraelí que incluye a Hezbolá, Hamás y los hutíes de Yemen, entre otros.
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