
Después del desbordamiento del río Guadalupe, en el condado de Kerr, Texas, una familia originaria de Guanajuato se encuentra desaparecida. Este desastre natural ha cobrado la vida de al menos 59 personas y ha dejado más de 20 desaparecidos hasta ahora.
El único integrante de la familia que ha sido hallado con vida es Leonardo, el hijo mayor de 18 años, quien fue rescatado unas cuatro horas después de iniciada la búsqueda. En contraste, su padre, Leonardo Romero; su madre, Natalia; y su hermano menor, de tan solo dos años, continúan desaparecidos desde el viernes 4 de julio.
La familia Romero estaba en la zona cuando ocurrieron las intensas lluvias que provocaron el arrastre de casas móviles, vehículos y otras estructuras a causa de las inundaciones