
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) afirmó que durante el sexenio de la presidenta Claudia Sheinbaum no se han registrado aumentos drásticos en los precios de la gasolina, como lo ha señalado la oposición. Por el contrario, en los primeros tres meses de su gobierno, el precio de la gasolina regular disminuyó un 0.4%, al pasar de 23.95 a 23.85 pesos por litro.
El titular de Profeco, Iván Escalante, señaló durante la conferencia matutina del viernes 3 de enero que los incrementos significativos en los precios de los combustibles se dieron durante los gobiernos panistas. Durante su intervención, presentó un análisis sobre la evolución del precio de la gasolina regular desde el gobierno de Felipe Calderón hasta la actual administración de Sheinbaum.
Escalante destacó que, incluso durante el mandato del expresidente Andrés Manuel López Obrador, el precio de la gasolina regular tuvo una reducción del 5.2%, al bajar de 25.48 a 24.15 pesos por litro, lo que demuestra, según él, que tanto López Obrador como Sheinbaum han cumplido su compromiso de evitar aumentos en el costo de los combustibles.
En contraste, Escalante indicó que, bajo el gobierno de Calderón, el precio de la gasolina aumentó un 22.9%, pasando de 14.75 a 18.10 pesos por litro. Mientras tanto, en la administración de Peña Nieto, el incremento fue del 42.8%, alcanzando los 26.01 pesos por litro. Además, subrayó que los precios de las gasolinas Magna, Premium y el diésel se han mantenido por debajo de la inflación durante los gobiernos de López Obrador y Sheinbaum, e incluso señaló que el precio del diésel ha disminuido un 11.03% en términos reales.
Como parte de las acciones contra abusos en las estaciones de servicio, Profeco implementará nuevas medidas. A partir del lunes 6 de enero, además de exhibir en la conferencia matutina a las gasolineras con precios elevados, se colocarán lonas en las estaciones señaladas, advirtiendo a los consumidores con la leyenda: «No cargues aquí, se vuelan la barda con los precios». Esta estrategia busca disuadir a los consumidores de adquirir combustible en lugares donde se detecten prácticas abusivas.