La Leucemia Mieloide Crónica (LMC), que alguna vez fue considerada una enfermedad mortal, hoy es controlable mediante tratamientos innovadores y un estricto monitoreo médico, lo que permite a quienes la padecen mantener una calidad y esperanza de vida similares a las de personas sanas. Así lo afirmó Gilberto Israel Barranco Lampón, jefe de la Clínica de Leucemias Crónicas y Neoplasias Mieloproliferativas del Hospital General de México “Eduardo Liceaga”.
Durante una entrevista por el Día Mundial de la LMC, el especialista explicó que este tipo de leucemia, clasificada dentro de las neoplasias mieloproliferativas, se distingue por la sobreproducción de células sanguíneas mieloides, especialmente neutrófilos, basófilos y eosinófilos. Su causa principal está ligada al cromosoma Filadelfia, originado por la translocación de segmentos entre los cromosomas 9 y 22, lo que desencadena la multiplicación descontrolada de células.
Barranco Lampón precisó que, aunque el origen es genético, no es un padecimiento hereditario, sino una alteración adquirida durante la vida. Los síntomas suelen aparecer en etapas avanzadas y van desde el crecimiento del bazo, que causa sensación temprana de llenura y pérdida de peso, hasta fiebre, fatiga crónica y sudoraciones nocturnas.
En el caso de México, se observan características diferentes a otros países: mientras en Europa y Estados Unidos el diagnóstico ocurre entre los 55 y 60 años, en territorio nacional se presenta en promedio a los 40 años, es decir, 15 años antes.
El especialista señaló que estudios básicos como la biometría hemática permiten detectar la enfermedad y que el acceso a tratamientos innovadores resulta esencial para mantener bajo control la leucemia. Enfatizó también la importancia de fomentar la cultura de la prevención mediante revisiones médicas frecuentes.
Finalmente, el Hospital General de México refrendó su compromiso de seguir ofreciendo atención integral y de trabajar de la mano con instituciones y sociedad para asegurar diagnósticos oportunos y acceso a terapias avanzadas para pacientes con LMC.