El Papa León XIV expresó su profunda cercanía espiritual a las comunidades de los estados afectados de México que en estos días han sido duramente golpeadas por intensas lluvias que han dejado víctimas, destrucción y sufrimiento entre tantas familias.
El Papa eleva fervientes oraciones al Señor por el eterno descanso de quienes han perdido la vida, y pide consuelo y esperanza para sus familiares y seres queridos. Asimismo, encomienda a la infinita misericordia de Dios a todas las personas afectadas, confiando en que no falten la solidaridad fraterna y el apoyo mutuo entre los hijos e hijas de esa noble tierra mexicana.
El Santo Padre también dirigió un pensamiento especial a quienes, con generosidad y sacrificio, participan en las labores de rescate, atención y reconstrucción, y anima a las comunidades cristianas a ser testimonio vivo de la caridad evangélica, acompañando con gestos concretos de ayuda a los más necesitados.
León XIV pone bajo la protección maternal de la Santísima Virgen de Guadalupe, Madre de todo el pueblo mexicano, a las víctimas de esta calamidad y a todos aquellos que sufren a causa de ella. Que la Virgen Santa, consuelo de los afligidos, sostenga la fe y la esperanza de los corazones heridos, y que el Señor derrame abundantes bendiciones de fortaleza y paz sobre toda la nación mexicana.