
El 21 de noviembre es el Día Mundial de la Televisión, una efeméride impulsada por la ONU desde el año 1996 y que busca propiciar el uso responsable de la televisión como uno de los principales canales de difusión de información pública.
Aunque para las generaciones actuales, se puede pensar que Internet es el medio de difusión más importante, lo cierto es que la web ha ofrecido a la televisión nuevas herramientas y recursos que, más que desplazarla, la han potenciado, como por ejemplo las difusiones en directo y el acceso a contenidos audiovisuales desde cualquier lugar y desde cualquier dispositivo.
La idea central de este día, que puede ser extrapolada al resto de los medios de comunicación, es que la televisión sirva como agente de difusión de noticias e información que sea relevante e enriquecedora para los habitantes del mundo.
Programas que promuevan la cultura de paz, que eduquen para mejorar las capacidades de desarrollo económico de las naciones y que brinden información veraz y fidedigna de sucesos importantes.
Hoy también se celebra el Día Internacional del Vestido
Desde modelos largos, cortos, unicolores o estampados, el vestido (del latín vestitus) ha definido al género femenino. Es un gran aliado para el uso cotidiano o alguna ocasión especial como fiestas, 15 años, un cóctel y el más hermoso de todos: el soñado vestido de novia.
La época de la prehistoria marcó el inicio del uso de prendas de vestir en los seres humanos, debido a la necesidad de cubrir el cuerpo por las temperaturas extremas y los cambios climáticos. Durante esta etapa de la historia de la humanidad se utilizaba la piel de los animales cazados por el hombre.
Posteriormente, el uso del vestido como prenda exclusiva femenina comenzó a finales del siglo XIII, caracterizado por un corsé que enfatizaba el busto y el torso femenino, cubriendo en su totalidad la parte inferior del cuerpo y la ropa interior que se usaba en la época, hasta evolucionar a una variedad de diseños, largos y colores.
El periodo denominado «Belle Epoque», comprendido entre los años 1890 a 1910, estaba dominado por la riqueza, la opulencia y la extravagancia. El código de vestimenta utilizado eran los vestidos largos y almidonados hasta el suelo, con diseños exclusivos acompañados de accesorios deslumbrantes como joyería y pelucas muy elaboradas.
En el siglo XX uno de los grandes referentes en el mundo de la moda fue Coco Chanel, con un vestido de corte simple que simbolizó la moda femenina de París, desde la década de los años 30 hasta los años 60.
Ya en la segunda mitad del siglo XX la evolución del sector textil incidió en la elaboración de prendas de vestir con telas más suaves, para su uso en temporadas más cálidas. A partir de los años 60 el vestido deja de ser la prenda femenina por excelencia dando paso a otras tendencias, basadas en faldas y pantalones que han evolucionado hasta hoy en día, por parte de grandes diseñadores e influencers de la moda.
Pero no sólo se festeja a la televisión y al vestido.
¡Hola! El saludo también tiene su día. El 21 de noviembre celebramos el Día Mundial del Saludo, como elemento básico y fundamental en la comunicación entre las personas. Es una muestra de cercanía y cortesía que se practica en todo el mundo.
Etimológicamente la palabra saludo proviene del latín «salutare», derivado de «salus» (salud), es por ello que saludar implica desearle salud a otra persona.