La presidenta Claudia Sheinbaum Pardo descartó encabezar personalmente un diálogo con el sector disidente del magisterio.
Durante la conferencia matutina, al ser cuestionada sobre la petición del magisterio de establecer una mesa de diálogo directo con ella, la mandataria dejó en claro que los responsables de entablar conversaciones con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) son los titulares de las secretarías de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, y de Educación Pública, Mario Delgado.
“La Secretaría de Gobernación y la SEP tienen plena capacidad para dialogar, negociar y buscar acuerdos con la CNTE. No es indispensable que hablen conmigo, ya que ambos secretarios cuentan con todas las atribuciones necesarias. Son altos funcionarios, no personal de menor rango”, señaló.
Sheinbaum afirmó que el diálogo con el magisterio, que mantiene un paro laboral y un plantón en el Zócalo capitalino desde hace 22 días, sigue abierto. Sin embargo, aclaró que no es viable anular la Ley del ISSSTE de 2007 en los términos que plantea la CNTE.
Indicó que, con las acciones implementadas a través del Fondo de Pensiones para el Bienestar, se ha avanzado hacia corregir las afectaciones de dicha ley en materia de pensiones, al menos en lo esencial y en términos de justicia para los trabajadores del Estado, incluidos los docentes.
Reiteró la disposición de su gobierno al diálogo, aunque advirtió que este debe conducir a puntos de encuentro: “El diálogo implica llegar a acuerdos. Si no hay coincidencias, es complicado. Además, no comprendemos la violencia ocurrida ayer en la Secretaría de Gobernación si el diálogo está vigente”.
Finalmente, hizo un llamado a los líderes de la CNTE a respetar las decisiones de las bases magisteriales.