En su mensaje navideño, el presidente Andrés Manuel López Obrador, en su último discurso del sexenio, expresó su deseo ferviente de paz y amor para los mexicanos durante la Nochebuena y Navidad. Acompañado por su esposa, Beatriz Gutiérrez Müller, el mandatario instó a evitar confrontaciones y pleitos en estas festividades.
Desde las afueras de la Capilla de la Emperatriz en Palacio Nacional, López Obrador recordó el nacimiento de Jesucristo, destacando su papel como predicador del humanismo y del amor. Enfatizó la importancia de pensar en el prójimo y desear la felicidad y mejora para todos, especialmente para los enfermos y los desposeídos.
El presidente hizo un llamado a no perder la fe y la esperanza en un futuro mejor, subrayando que la Nochebuena es un momento propicio para la paz y el amor, no para la confrontación ni la guerra. Beatriz Gutiérrez Müller, al tomar la palabra, extendió los buenos deseos a todas las familias mexicanas, compartiendo la intención de celebrar la Nochebuena en paz y alegría junto con la familia presidencial.
En un gesto cálido, López Obrador concluyó su mensaje con un llamado a compartir «mucho amor», simbolizado con un abrazo simbólico. En este tono, el presidente enfatizó la importancia de la unidad y la reflexión en estas festividades, destacando que todos son parte de una gran familia que busca el bienestar común.