
La Organización Mundial de la Salud, lanzó una advertencia sobre un verano «inusualmente cálido» en Europa, alertando sobre los riesgos asociados con las altas temperaturas y recordando los impactos mortales del calor extremo en el continente
El director regional para Europa de la OMS, Hans Henri P. Kluge, recordó que el año pasado el calor extremo causó 20 mil muertes entre junio y agosto.
A través de un comunicado, Kluge ha citado un informe de la Unión Europea y la Organización Meteorológica Mundial que advertía de que Europa se ha estado calentando dos veces más rápido que la media mundial desde los años ochenta, y el calor extremo en los meses de verano «se está convirtiendo en la norma, no en la excepción».
De esta forma, ha pedido cuidarse los unos a los otros durante los meses de verano vigilando a sus parientes y vecinos ancianos, limitando la actividad al aire libre cuando haga mucho calor, manteniéndose hidratados, manteniendo frescas sus casas y permitiéndose tiempo para descansar.