El gobierno federal anunció este día que el país desarrollará una red nacional de supercómputo encabezada por una nueva “supercomputadora”, proyectada para ser la más poderosa de toda América Latina.
Para avanzar en este objetivo, la mandataria informó durante la conferencia mañanera que se firmó un convenio de colaboración con el Barcelona Supercomputing Centre (BSC), uno de los complejos de cómputo avanzado más importantes del mundo. Esta alianza busca impulsar proyectos científicos estratégicos y fortalecer la soberanía tecnológica del país.
El coordinador nacional de Infraestructura Digital, Jorge Luis Pérez Hernández, adelantó que la próxima semana se hará el anuncio formal sobre la llegada de esta supercomputadora, la cual será la de mayor capacidad en la región.
Explicó que esta tecnología permitirá desarrollar modelos meteorológicos, mejorar el procesamiento de imágenes para el sector agrícola, analizar datos aduaneros y de riesgo, así como avanzar en modelos de lenguaje basados en inteligencia artificial.
“La próxima semana confirmaremos la llegada de la supercomputadora más grande de América Latina; será completamente mexicana y tendrá capacidades muy superiores a la existente en el sur del continente, que pertenece a una empresa privada”, afirmó.
En cuanto a su puesta en operación, Pérez Hernández señaló que podría comenzar a utilizarse a partir del próximo año. Además, aseguró que toda la información procesada quedará bajo resguardo del gobierno y de la comunidad científica mexicana, garantizando que “los datos no estarán bajo control de terceros”.
Asimismo, destacó que en el desarrollo y operación del proyecto participarán especialistas de la Secretaría de Ciencia, Humanidades, Tecnología e Innovación (Secihti), del Instituto Politécnico Nacional y de la Agencia de Transformación Digital.
Finalmente, Mateo Valero Cortés, director del BSC, subrayó la relevancia de que los países cuenten con infraestructura de supercómputo, afirmando que “una nación que no computa, no compite”.