El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Omar García Harfuch, confirmó la captura de Rigoberto “N”, señalado como presunto cabecilla de la célula criminal “Los Blancos de Troya” y probable responsable del homicidio de Bernardo Bravo, presidente de la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán, en Michoacán.
De acuerdo con García Harfuch, la detención se logró tras una serie de trabajos de investigación realizados luego del asesinato del líder limonero. En un operativo coordinado entre la Secretaría de la Defensa Nacional, la Fiscalía de Michoacán, la SSPC, el Gabinete de Seguridad y el Gobierno estatal, fue asegurado Rigoberto “N”, identificado como uno de los principales encargados del cobro de extorsiones a productores de limón en Apatzingán.
“El operativo se efectuó en Michoacán con la colaboración de autoridades federales y estatales. Las indagatorias continuarán hasta dar con todos los involucrados en este crimen”, señaló el titular de la SSPC a través de un mensaje en la red social X.
El Gabinete de Seguridad explicó que Rigoberto “N” fungía como jefe operativo de la red de extorsión impuesta por “Los Blancos de Troya”, grupo criminal vinculado con “Los Viagras” y el “Cártel Jalisco Nueva Generación” en la región limonera.
Tras su detención, se informó al acusado sobre sus derechos y fue puesto a disposición del Ministerio Público, donde se definirá su situación legal.
Bernardo Bravo Manríquez, asesinado recientemente a balazos, había denunciado de forma reiterada las extorsiones que sufrían los productores de limón en la zona. Como presidente de la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán, representaba al 80% de la producción limonera del estado, uno de los principales motores agroindustriales de Michoacán con orientación a la exportación hacia Estados Unidos.