
Miles de simpatizantes se congregaron este sábado en el Zócalo de la Ciudad de México para escuchar el mensaje de la presidenta Claudia Sheinbaum con motivo de su primer año de gobierno.
El acto comenzó con la interpretación del Himno Nacional, tras la llegada de la mandataria al templete instalado en la plaza central. La jefa de Gobierno capitalina, Clara Brugada, abrió el evento recordando el legado político de Andrés Manuel López Obrador y destacando que en la Ciudad de México “comenzó todo”, en alusión al origen del movimiento de transformación.
Durante su mensaje, Sheinbaum subrayó que la honestidad es una regla y no la excepción en su administración, advirtiendo que “quien traiciona al pueblo, enfrenta la justicia”. También reconoció a López Obrador como un ejemplo de honradez, austeridad y amor al pueblo.
La presidenta celebró los avances económicos alcanzados durante su gestión, como la reducción de la pobreza, el desempleo y la inflación, así como el crecimiento del turismo. Enfatizó además que en su gobierno “no hay represión ni censura”.
En materia social, Sheinbaum afirmó que México cuenta con el plan social más ambicioso en su historia, destacando que 13 millones de adultos mayores y 1.6 millones de personas con discapacidad reciben pensiones, mientras que millones de estudiantes cuentan con becas en distintos niveles educativos.
Asimismo, agradeció al Congreso de la Unión y a las legislaturas locales por aprobar reformas fundamentales, entre ellas la que permite elegir a ministros y jueces por voto popular, así como las que fortalecen la Guardia Nacional, reconocen los derechos de los pueblos indígenas y elevan los programas sociales a rango constitucional.
En materia de seguridad, Sheinbaum afirmó que la estrategia se define soberanamente en México, sin injerencias externas, y destacó una reducción del 32% en homicidios dolosos durante los primeros 12 meses de su gobierno.
Finalmente, la presidenta reafirmó su entrega total al bienestar del pueblo mexicano, asegurando que su compromiso es “defender a la patria” y “entregar su alma, su vida y lo mejor de sí misma por México”. Concluyó su discurso con arengas de “¡Viva México!” y la entonación del Himno Nacional.