
El Instituto Jane Goodall confirmó este miércoles el fallecimiento de la reconocida primatóloga británica en California, a los 91 años, debido a causas naturales. La Dra. Goodall, fundadora de su propio instituto y Mensajera de la Paz de la ONU, se encontraba en una gira de conferencias en Estados Unidos al momento de su muerte.
Durante más de seis décadas, sus investigaciones en la reserva Gombe Stream, en Tanzania, revolucionaron la etología al demostrar que los chimpancés son capaces de fabricar y usar herramientas, un descubrimiento que transformó la visión científica sobre la relación entre humanos y primates.
Además de sus aportes científicos, Goodall dedicó gran parte de su vida a la defensa del medio ambiente. A través del Instituto Jane Goodall y el programa juvenil Roots & Shoots, impulsó proyectos de conservación, educación ambiental y restauración ecológica. Su voz fue escuchada en foros internacionales, donde insistió en la urgencia de actuar frente al cambio climático y la pérdida de biodiversidad.
Su legado incluye más de 40 documentales y publicaciones que acercaron al mundo la belleza y fragilidad de la naturaleza. Reconocida por su empatía, claridad y compromiso, inspiró a generaciones enteras de ambientalistas y científicos.
La partida de Jane Goodall marca el final de una era en la ciencia y la conservación, pero sus enseñanzas y acciones continúan vigentes. Admiradores y colegas de todo el mundo rinden homenaje a quien enseñó a observar la vida con respeto, curiosidad y compasión hacia todas las especies.