
Cada 1 de septiembre se conmemora el Día Internacional de los Primates, una fecha dedicada a resaltar la importancia de proteger a estas especies de mamíferos y a generar conciencia sobre el riesgo de extinción que enfrentan varias de ellas.
Las principales amenazas que ponen en peligro su supervivencia incluyen la deforestación de su hábitat, el cambio ambiental, la propagación de enfermedades virales, la caza furtiva, así como su explotación con fines comerciales y de entretenimiento.
Esta efeméride fue establecida en 2005 gracias a la iniciativa de la organización Animal Defenders International, con el propósito de visibilizar la persecución y explotación que sufren los primates en distintas partes del mundo. Desde entonces, ha recibido el respaldo de diversas asociaciones defensoras de los animales.
Los primates constituyen uno de los grupos más antiguos de mamíferos placentarios, con un origen que se remonta a más de 58 millones de años. Actualmente, se reconocen alrededor de 200 especies dentro de esta orden.
El término primates, que en latín significa “primeros”, fue introducido en 1758.
Entre sus características más destacadas se encuentran:
-Son mamíferos plantígrados, es decir, caminan apoyándose en la planta de los pies.
-Poseen un cerebro altamente desarrollado.
-Sus manos y pies son flexibles, con uñas y pulgares oponibles.
-Su peso puede variar entre 30 y 200 kg.
-Tienen visión binocular y cromática, lo que les permite calcular distancias con precisión.
-Disfrutan de una larga esperanza de vida.
Todas las especies cuentan con manos prensiles, útiles para sujetar ramas y manipular alimentos.
Algunos de los más conocidos son:
-Lémures
-Orangutanes
-Chimpancés
-Gorilas
-Mandriles
-Bonobos
-Diversos tipos de monos, como los ardilla, lanudos y carita