
(Brasília - DF, 16/08/2022) Solenidade de Posse dos Ministros Alexandre de Moraes e Enrique Ricardo Lewandowski nos cargos de Presidente e Vice-Presidente do TSE..Foto: Isac Nóbrega/PR
El gobierno de Estados Unidos impuso sanciones contra Alexandre de Moraes, magistrado de la Corte Suprema de Brasil, acusándolo de autorizar detenciones previas al juicio sin fundamento legal y de reprimir la libertad de expresión.
De Moraes está a cargo del caso penal contra el expresidente Jair Bolsonaro, quien enfrenta acusaciones por presuntamente haber intentado organizar un golpe de Estado. El expresidente estadounidense Donald Trump relacionó estas sanciones con lo que calificó como una «persecución política» contra su aliado brasileño. El anuncio de sanciones por parte del Departamento del Tesoro se produjo tras declaraciones del secretario de Estado, Marco Rubio, quien en junio había adelantado que se evaluaban medidas contra el juez.
Las sanciones se aplicaron bajo la Ley Global Magnitsky, que permite al gobierno estadounidense tomar acciones contra individuos extranjeros involucrados en corrupción o violaciones a los derechos humanos.
“El juez Alexandre de Moraes ha actuado como juez y parte en una persecución ilegal contra ciudadanos y empresas tanto de Brasil como de Estados Unidos”, señaló el secretario del Tesoro, Scott Bessent, acusándolo de liderar una campaña de censura, de ordenar detenciones arbitrarias y de conducir procesos judiciales con motivaciones políticas, incluyendo acciones contra Bolsonaro.
Recientemente, De Moraes ordenó que Bolsonaro portara un dispositivo de monitoreo en el tobillo y se abstuviera de usar redes sociales, tras acusaciones de que había buscado influir en el expresidente Trump. Ni el magistrado ni la Corte Suprema brasileña han emitido comentarios hasta el momento.
A comienzos de este mes, Washington también impuso restricciones de visado al propio De Moraes, a su familia y a otros funcionarios judiciales no identificados, intensificando así la tensión diplomática. El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, calificó estas sanciones como “arbitrarias” y “sin fundamento”, y rechazó cualquier intromisión extranjera en las decisiones del sistema judicial brasileño, considerándola una violación a la soberanía nacional.
Las restricciones de visado se emitieron como respuesta a decisiones judiciales que incluyeron cateos y medidas restrictivas contra Bolsonaro, quien es señalado de intentar revertir los resultados de las elecciones de 2022, que perdió. En una carta publicada a mediados de julio, Trump justificó la imposición de un arancel del 50% a productos brasileños, argumentando su desacuerdo con el tratamiento judicial dado a Bolsonaro.
Por su parte, el exmandatario brasileño ha negado haber encabezado un intento de golpe, aunque reconoció haber estado presente en reuniones donde se discutió cómo anular el resultado electoral.