
A 22 años de los ataques terroristas del 11 de septiembre, las emociones de familiares, amigos y colegas de las víctimas siguen palpables.
La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, junto al alcalde de Nueva York, Eric Adams, y la gobernadora del estado, Kathy Hochul, presidieron este lunes en la «zona cero» de la Gran Manzana los actos de homenaje.
Lo más novedoso este año es que han sido identificadas dos nuevas víctimas, un hombre y una mujer cuyos nombres no han hecho públicos por expreso deseo de las familias, lo que las convierte en las víctimas número mil 948 y mil 649, gracias a tests avanzados de ADN, según anunció el viernes el alcalde Adams, que destacó que son las primeras identificaciones tras dos años.
En el Pentágono, recordaron a las 184 personas que perdieron la vida el 11 de septiembre de 2001. Entre los reunidos en el patio de la institución estadounidense estaban amigos cercanos, familiares y compañeros de trabajo.
En Shaksville, Pensilvania, donde se estrelló un avión, se recordó a los pasajeros que fallecieron ese día.
A través de redes sociales, el presidente, Joe Biden, dijo que la historia estadounidense en sí misma cambió hace 22 años, «pero lo que no pudo cambiar ni cambiará es el carácter de la nación».
Aquí en México, el embajador de Estados Unidos, Ken Salazar, recordó a las víctimas y reconoció que ni la pérdida ni el dolor han disminuido.
Casi tres mil personas de 93 países perdieron la vida ese día. Se considera como el peor ataque en suelo estadounidense desde el ataque japonés a Pearl Harbor en 1941.