
Tras intensas negociaciones y una extensa sesión de trabajo que incluyó tres reuniones, el Senado de la República aprobó en lo general, con 86 votos a favor, 42 en contra y ninguna abstención, la reforma constitucional relacionada con la Guardia Nacional, un asunto clave en el ámbito político y de seguridad nacional.
La votación definitiva se realizó luego de que los grupos parlamentarios expresaron sus posturas y se escucharan los argumentos tanto a favor como en contra de la propuesta.
La sesión comenzó a las 21:30 horas, siendo la tercera del día dedicada exclusivamente a esta importante reforma, la cual ha generado numerosas propuestas particulares y un profundo debate entre los senadores de todas las facciones políticas.
Durante el proceso, intervinieron oradores de distintos partidos. Senadores como Alejandra Barrales (MC) y Marko Cortes (PAN) defendieron sus votos particulares, mientras que representantes de Morena como Claudia Anaya y Alejandro Murat destacaron la importancia de consolidar la Guardia Nacional dentro de un marco constitucional robusto.
En la etapa final de la discusión, cada grupo parlamentario manifestó su postura respecto a la reforma. El Movimiento Ciudadano (MC), Partido del Trabajo (PT), Partido Verde Ecologista de México (PVEM), Partido Revolucionario Institucional (PRI), Partido Acción Nacional (PAN) y Morena hicieron uso de su tiempo para intervenir.
Finalmente, tras dos rondas de oradores —cinco a favor y cinco en contra en cada una— se llevó a cabo la votación general. La reforma fue aprobada por una mayoría significativa, lo que facilita la implementación de las modificaciones constitucionales y el futuro de la Guardia Nacional en México.
La reforma ha sido polémica, con algunos senadores de oposición argumentando que atenta contra principios de seguridad pública y control civil, mientras que sus defensores consideran que fortalecerá la capacidad del Estado para enfrentar los desafíos de seguridad.
El siguiente paso será debatir las reservas planteadas por las distintas facciones parlamentarias, si se considera necesario.
De acuerdo con el reglamento del Senado, el debate duró 6 horas y 20 minutos, cumpliendo con los tiempos estipulados para cada intervención, tanto en la votación general como en la particular.