
El 8 de noviembre de 2007, la Asamblea General de las Naciones Unidas decidió que el 15 de septiembre de cada año se celebraría el Día Internacional de la Democracia, siendo la primera celebración en 2008.
El progreso de la democracia depende del papel crucial de los jóvenes, promoviendo su participación y haciéndoles entender que su voz es importante. Además, se reconoce que los jóvenes están especialmente comprometidos con la crisis climática y que su futuro está vinculado a las acciones que se tomen hoy. Por ello, la ONU destaca la importancia de empoderar a la juventud en temas clave como la justicia climática.
Este día se conmemora el 15 de septiembre de 1997, cuando la Unión Interparlamentaria aprobó la Declaración Universal de Democracia.
La idea surgió tras varias Conferencias Internacionales sobre Democracias Nuevas y Restauradas, impulsadas en 1988 por la entonces presidenta de Filipinas, Corazón Aquino. Después de la sexta conferencia en Qatar, se propuso la creación de un Día Internacional de la Democracia, y se sugirió el 15 de septiembre como fecha de conmemoración.
Aunque el 15 de septiembre es la fecha oficial, algunos países tienen sus propias fechas o formas de celebrar la democracia, como Canadá, donde se propone una semana entera dedicada a ella, o Estados Unidos, donde se ha sugerido hacerla coincidir con el día de elecciones generales. Otros ejemplos son Cabo Verde el 13 de enero y Nigeria el 29 de mayo, fechas que marcan hitos importantes en sus historias democráticas.
La democracia es un valor universal con diferentes interpretaciones, todas compartiendo principios y valores comunes. Por ello, es esencial promover prácticas que consoliden la cultura democrática y conciencien a los ciudadanos sobre sus derechos y responsabilidades.