
Un tribunal de Montana dio la razón a un grupo de niños y jóvenes que acusaron a este estado de Estados Unidos de violar su derecho a crecer en un medio ambiente limpio y sano.
En este sentido, la jueza Kathy Seeley declaró inconstitucional una ley de Montana que prohíbe a la administración local tomar en cuenta el impacto de los gases de efecto invernadero en el clima a la hora de conceder permisos a empresas de combustibles fósiles.
De acuerdo con el razonamiento de Seeley, el desarrollo de la industria no toma en cuenta el impacto que tienen las emisiones contaminantes en el cambio climático ni en la salud de los habitantes de una región.
«Los demandantes tienen un derecho constitucional fundamental a un medioambiente limpio y sano, que incluye el clima», escribió Seeley en su fallo de más de 100 páginas.
Los 16 demandantes, de edades comprendidas entre los cinco y los 22 años y que no pedían compensaciones financieras, presentaron pruebas durante el juicio, iniciado en junio pasado, de que el incremento de las emisiones de dióxido de carbono está provocando temperaturas más altas, sequías e incendios, y problemas de salud entre la población.
Es la primera vez que se invoca ante un tribunal la Constitución de un estado estadounidense para atacar a las autoridades locales por un tema climático.
Los demandantes tenían a su favor un artículo de la constitución local que dice claramente: «El estado y cada persona mantendrán y mejorarán un medio ambiente limpio y sano en Montana para las generaciones presentes y futuras».
Montana tiene poco más de un millón de habitantes, pero emite tanto CO2 como Argentina.