En el municipio de Guadalupe y Calvo, Chihuahua, la presidenta Claudia Sheinbaum encabezó la firma del decreto mediante el cual se devuelven alrededor de tres mil hectáreas de territorio a la comunidad Ódami, como parte del Plan de Justicia para los Pueblos de la Sierra Tarahumara.
Durante el acto, la mandataria subrayó que la entrega de estas tierras representa el reconocimiento de un derecho histórico, al tratarse de espacios que siempre pertenecieron a la comunidad, pero que no habían sido legalmente reconocidos. Destacó que esta restitución busca avanzar en la justicia territorial y en el fortalecimiento de los pueblos originarios de la región.
Sheinbaum informó que las familias que habiten las hectáreas restituidas serán incorporadas al programa Sembrando Vida, con el objetivo de impulsar proyectos productivos forestales y agrícolas que les permitan desarrollarse y generar ingresos en su propio territorio.
Asimismo, recordó que en 2024 se reformó el artículo 2 de la Constitución para reconocer a los pueblos indígenas y afromexicanos como sujetos de derecho público, y enfatizó la importancia de convertir esa reforma en acciones concretas, para que no quede únicamente en el texto constitucional, sino que se traduzca en derechos reales y efectivos.
La presidenta estuvo acompañada por integrantes del gabinete federal y por la gobernadora de Chihuahua, María Eugenia Campos.
Durante el encuentro, habitantes de la región expusieron diversas necesidades, entre ellas la electrificación de comunidades, la construcción de escuelas y albergues, acceso a internet, servicios de salud, así como la rehabilitación de carreteras y caminos, los cuales señalaron se encuentran en malas condiciones.
Ante estas peticiones, Sheinbaum instruyó a los funcionarios a dar seguimiento puntual y se comprometió a regresar en un año para evaluar los avances, además de señalar que se revisa la seguridad en los caminos en coordinación con el gobierno estatal y la Guardia Nacional.
Por su parte, Adelfo Regino, titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas, destacó que en la Sierra Tarahumara ya se han restituido un total de 6 mil 26 hectáreas y que, en lo que va de la administración, se han firmado cinco decretos de este tipo.
Finalmente, la gobernadora María Eugenia Campos reconoció la coordinación con el Gobierno de México y afirmó que existe disposición para trabajar de manera conjunta en la atención del rezago histórico que han enfrentado los pueblos originarios, especialmente en la región serrana, con un enfoque de justicia, dignidad y reconocimiento.
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