Este jueves, el Senado recibió la dimisión de Alejandro Gertz Manero como titular de la Fiscalía General de la República (FGR). La carta fue entregada por un mensajero enviado desde la propia Fiscalía, quien presentó el documento en el que se exponen las razones de su salida. Tras un receso de cuatro horas, la Cámara de Senadores hizo pública la renuncia y notificó oficialmente a la Presidencia de la República.
Con la salida de Gertz Manero, se activa el mecanismo establecido en el artículo 102 constitucional para elegir a la nueva persona titular de la FGR. Mientras se realiza el proceso, Cristina Reséndiz, quien encabeza la Fiscalía Especializada de Control Competencial, asumirá temporalmente las funciones de fiscal general.
En los próximos días, la Presidencia de la República enviará al Senado una terna de aspirantes, seleccionada a partir de una lista de diez nombres propuesta por la propia cámara. Posteriormente, las personas candidatas deberán comparecer ante las y los senadores, quienes emitirán un dictamen de idoneidad. Finalmente, el Pleno del Senado elegirá al nuevo fiscal general por mayoría calificada de dos tercios, un proceso que podría concluir la próxima semana.
A sus 86 años, Alejandro Gertz Manero fue el primer fiscal general autónomo del país. Aunque su periodo concluía en 2028, decidió dejar el cargo antes de tiempo, cerrando una gestión marcada por la autonomía institucional y diversos cambios en la FGR.
La renuncia ocurre en un contexto de alta relevancia pública y política, con efectos en la relación entre la Fiscalía y el Gobierno Federal. La Junta de Coordinación Política, encabezada por Adán Augusto López, revisó el tema junto a los líderes parlamentarios, subrayando la relevancia del proceso de sucesión para la Fiscalía y la estabilidad institucional del país.