El Papa León XIV hizo un llamado a establecer una pausa global de 24 horas con motivo de la Navidad y manifestó su profunda preocupación al señalar que “Rusia aparentemente ha rechazado esta solicitud”.
Desde su residencia en Castel Gandolfo, a las afueras de Roma, el pontífice reiteró ante los medios su exhortación a todas las personas de buena voluntad para que se respete, al menos durante la celebración del nacimiento de Jesucristo, un día de paz en todo el mundo. Expresó su esperanza de que este mensaje sea escuchado y permita vivir, aunque sea por un breve lapso, una jornada sin violencia.
El Papa confesó que una de las situaciones que más tristeza le generan es la negativa rusa a aceptar la propuesta de una tregua navideña, insistiendo en que este llamado está dirigido a toda la comunidad internacional.
En relación con el conflicto en Gaza, recordó que recientemente la parroquia de la Santísima Trinidad —la única iglesia católica en la Franja— recibió la visita del patriarca latino de Jerusalén, Pierbattista Pizzaballa, quien pudo dialogar con el párroco local, el sacerdote argentino Gabriel Romanelli.
Días antes, durante el rezo del ángelus y la tradicional bendición de las figuras del Niño Jesús del Belén, el Papa León XIV también invitó a orar para que “todos los niños del mundo puedan vivir en paz”.
