Durante el mes de noviembre se celebra una de las expresiones artísticas más admiradas y prestigiosas a nivel internacional: el Día Mundial del Ballet. En esta jornada participan destacadas compañías de ballet de todo el mundo, que organizan actividades como transmisiones en vivo de presentaciones y clases, además de entrevistas y charlas con profesionales de la danza.
El Día Mundial del Ballet no tiene una fecha fija en el calendario, ya que varía según la organización responsable. En 2025, la conmemoración tendrá lugar este 12 de noviembre, un evento muy esperado tras la pausa que se realizó en 2024 para retomar con mayor impulso.
La primera edición se llevó a cabo el 1 de octubre de 2014, cuando cinco de las más reconocidas compañías de ballet del planeta ofrecieron 20 horas de transmisión en vivo a través de YouTube y sus sitios web oficiales:
The Royal Ballet (Londres, Reino Unido)
The Australian Ballet (Melbourne, Australia)
Bolshoi Ballet (Moscú, Rusia)
San Francisco Ballet (Estados Unidos)
The National Ballet (Toronto, Canadá)
El ballet es una forma de danza clásica que puede interpretarse de manera individual o en grupo sobre un escenario.
El término proviene del italiano balleto, diminutivo de ballo (baile), palabra que comenzó a usarse alrededor de 1630 para describir ciertos tipos de danza. Según la Real Academia Española (RAE), “ballet” designa tanto a la compañía de bailarines como a la música compuesta para este género artístico.
La formación en ballet suele iniciarse desde edades tempranas, alrededor de los seis años, debido a la precisión, control corporal y concentración que requiere. Antes de cada práctica, los bailarines realizan ejercicios de calentamiento para prevenir lesiones. Además, emplean ropa ceñida al cuerpo y las tradicionales zapatillas de ballet.
Entre los beneficios de esta disciplina destacan el fortalecimiento muscular, la mejora del equilibrio, la coordinación y la conciencia espacial y temporal.
El ballet tuvo sus primeras manifestaciones en Italia durante el Renacimiento, en el siglo XV. Posteriormente, gracias a la influencia y el mecenazgo de Catalina de Médici, noble italiana establecida en Francia, esta danza se expandió por Europa y dio origen al Ballet de la Corte, una forma artística que combinaba literatura y música para entretener a la aristocracia.
En 1573, se representó por primera vez el Ballet des Polonais, en honor a un embajador de Polonia que visitaba París.
Más adelante, en el siglo XVII, el rey Luis XIV de Francia, conocido como el Rey Sol, fundó la Académie Royale de Musique en la Ópera de París, donde surgió la primera compañía profesional: el Ballet de la Ópera de París.
A lo largo del siglo XX, esta disciplina se consolidó globalmente, dando origen a nuevas compañías y estilos de ballet, muchos de ellos influenciados por la danza contemporánea o de concierto.
Curiosidades del Ballet
-Durante la Segunda Guerra Mundial, el ballet fue el único arte moderno no prohibido por Adolf Hitler.
-Solo las mujeres realizan los pasos en punta; los hombres bailan al nivel del suelo.
-El 26 de julio es considerado una fecha de mala suerte para los bailarines, pues en 1862 la bailarina Emma Livry falleció tras incendiarse su vestuario en plena función.
-El primer tutú surgió en 1820 en Europa.
-Hasta comienzos del siglo XX, los tutús eran largos, pero luego se acortaron para resaltar los movimientos de las piernas.
-Las zapatillas utilizadas por las bailarinas se conocen popularmente como “puntas”.
-En una clase de ballet se pueden quemar unas 250 calorías, lo que equivale a correr 30 kilómetros.
-Al realizar un salto en punta, un bailarín soporta hasta tres veces su peso corporal sobre las puntas de sus dedos.