Autoridades de Estados Unidos informaron este lunes que desactivaron un plan terrorista que pretendía ejecutarse durante la víspera de Año Nuevo en el sur de California. El operativo, encabezado por el Buró Federal de Investigaciones (FBI), culminó con la captura de cinco personas presuntamente ligadas a un grupo antigubernamental.
Kash Patel, director del FBI, señaló que los detenidos pertenecen a una “célula radical” asociada al llamado Frente de Liberación de la Isla Tortuga (TILF), organización que las autoridades catalogan como extremista, con posturas propalestinas, antipolicía y contrarias al gobierno.
De acuerdo con las indagatorias, los implicados planeaban llevar a cabo ataques simultáneos mediante artefactos explosivos improvisados en al menos cinco puntos distintos de Los Ángeles, aprovechando la concentración de personas durante las celebraciones de fin de año.
“Estaban presuntamente organizando ataques coordinados con explosivos improvisados en la víspera de Año Nuevo”, confirmó Patel a través de la red social X.
Por su parte, la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, detalló que la célula también tenía como blancos a las autoridades migratorias. Entre sus objetivos figuraban agentes y vehículos del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE), una dependencia con fuerte presencia en California y zonas fronterizas.
“El Frente de Liberación de la Isla Tortuga —un grupo de extrema izquierda, propalestino, antigubernamental y anticapitalista— se preparaba para ejecutar una serie de atentados con bombas en distintos puntos de California a partir de Año Nuevo, además de ataques contra personal y unidades del ICE”, indicó Bondi en un comunicado.
Aunque el núcleo del complot se localizaba en la costa oeste, el despliegue federal se amplió hasta otros estados. En Los Ángeles y el condado de Orange fueron detenidas cuatro personas directamente relacionadas con el plan de los explosivos.
En tanto, en Nueva Orleans, Luisiana, agentes federales arrestaron a un quinto sospechoso vinculado al TILF, quien presuntamente preparaba un “ataque violento independiente”.
La fiscal Bondi calificó las detenciones como una acción decisiva que “evitó lo que pudo haber sido un complot terrorista de consecuencias devastadoras”.
Hasta el momento, las autoridades no han dado a conocer los nombres de los detenidos ni los sitios específicos donde se planeaban las detonaciones, debido a que la investigación sigue abierta. No obstante, se prevé un reforzamiento de la seguridad en California rumbo al 31 de diciembre.